En estos días nos sorprendió y lleno de satisfacción la llegada de una nueva
Patacabra Jubilada, que en esta ocasión venía ampliamente custodiada por su propietario,
Vicente Barreno Solano, y por sus compañeros de trabajo, jefe y familiares (esposa, padre y hermanos). Se podía palpar la emoción de todos ellos en este acto tan emotivo, el final de una trayectoria profesional que empezó a una edad temprana.
Vicente nació en la calle Rosario, número 6, el 24 de marzo de 1952. Hijo de Curro y Luisa, desde su más tierna infancia pudo ver cómo su padre trabajaba en una pequeña mesa que compartía con su cuñado Jacinto a la entrada del patio de la casa. En este mismo lugar ayudaba en ocasiones a su padre, que empieza a instruirlo en la sección de mesa forrando unos tacos de madera que hacía para los estuches. El 5 de enero de 1970 entra en la empresa Hispania, donde trabajaba su padre. Fue dado de alta desde el primer día y se incorpora en la sección de envase. Pasaría al corte de forros y más tarde al de piel, donde nos relata cómo se hacía el corte del cocodrilo buscando el máximo aprovechamiento y la dureza de sus conchas a la hora de trazarlos con el chavetin. Paralelamente, después de su jornada empieza a hacer trabajos como fundas de gafas, llaveros y americanos. Cambiaría de sección a propuesta de uno de sus jefes, Pepe, que le dice que quería que se cambiara a la mesa, concretamente con Sebastián Sánchez, que era el oficial encargado. Su especialidad fueron los bolsos pegados a filete inglés y tocando toda la gama de reptil. En poco tiempo lo pasaron a formar su mesa, donde estaría su hermano José como ayudante. En esta empresa estaría hasta su cierre en el 2001. Más tarde pasaría a la empresa de Antonio Núñez y por último en la empresa Bench Works, donde realizó diferentes funciones, entre otras la realización de muestras.
Esta patacabra se la dieron en la fábrica de Hispania y consta en nuestro registro con el numero 138. [Fotos: Paco Solano]
